Cuando hace unos meses se anunció el cierre de Chila, a todos los amantes de la alta cocina se nos piantó un lagrimón.
Sin embargo, el restaurante comandado por Pedro Bargero tenía pensada una última sorpresa: el proyecto Amarra de cocina federal, una invitación a restaurantes de distintos puntos del país para mostrar durante tres semanas su propuesta en Buenos Aires.
El primer chef en tomar la cocina de Chila fue Sebastian Weigandt del restaurante Azafrán , para mí uno de los mejores restaurantes de Mendoza y de Argentina, que diseñó un menú degustación que recorre preparaciones y productos típicos de la gastronomía mendocina, pero con reversiones maravillosas.
El menú incluyó, entre otras cosas, una versión de tomaticán servido dentro de un huevo, con tomate ahumado y un merengue increíble, el macaron de algarroba con queso de cabra (uno de los clásicos de Azafrán), una especie de fondue de cebollas, el curry de maíz con espuma de provolone que ya había hecho su debut en Mappa, trucha curada con arroz negro y perlas de manzana verde, y probablemente el mejor chivo de mi vida (caramelizado y tan tierno que fue una locura).
La armonización de vinos también recorre diferentes bodegas, cepas y regiones, empezando por un Riesling de Luigi Bosca y pasando por Criolla de la quebrada jujeña, espumante, Rosado de Cafayate, Malbec de los Valles Calchaquíes, para terminar con el hermosísimo Solería (un vino fortificado de Torrontes, vinificado como un Oporto, creación de Malamado).
El menú de Azafrán estará disponible hasta el 6 de mayo, y después lo siguen Ruda Cocina, Anima, Herencia y el cierre con Darío Gualtieri.
La riqueza gastronómica argentina es gigante. Por suerte, cada vez tenemos más posibilidades de conocerla, con proyectos que apuntan a federalizarla un poco más, y que le dan a quienes la representan la chance de llevar sus propuestas en distintos lugares.
Amarra es un proyecto hermoso por donde se lo mire (y riquísimo por donde se lo pruebe). Ojalá sea el puntapié para muchas «amarras», en distintos puertos y ciudades.
Por lo pronto, yo con esta experiencia quedé fascinada
Las fotos de esta nota fueron tomadas con un Motog82 5G de Motorola Argentina