Apenas 130 Km separan a estos dos gigantes de los embutidos, dos pueblos cordobeses mayormente conformados de inmigrantes italianos de distintas regiones, las que marcan la diferencia a la hora de hacer su producto estrella, el salame.
Así como Capuletos y Montescos, Colonia de Caroya y Oncativo esgrimen sus diferencias con su producto estrella, el salame, siendo estos pueblos reconocidos a nivel nacional por sus chacinados. Cada pueblo tiene su fanático, porque si bien tienen similitudes, cada uno tiene su receta infalible para hacerlos.
La realidad que los dos son riquísimos, sobre todo acompañados de pan, queso y un vaso de vermú. Pero vamos con las diferencias.
En Colonia de Caroya la inmigración es mayormente de la región de Friuli-Venezia Giulia, bien al norte italiano, y su receta contiene mayormente carne de vacuna (en principio por la actividad ganadera de la región) seguida por cerdo, el infaltable tocino, y para saborizarlo vino, ajo y especias.
Mientras que sus vecinos de Oncativo, también con inmigrantes italianos, pero mayormente del Piamonte, su receta es bastante más cerdo que vaca, tocino y para darle su sello se le agrega: vino blanco con ajo, canela, pimienta blanca y nuez moscada.
Pero a la vista al comerlo, la principal diferencia es el tamaño del “picado”, el de Colonia Caroya tiene “dados” mas grandes que el de Oncativo, casi duplicando su tamaño, pero a no confundirse que el tamaño del picado de Oncativo no es tipo fuet, sino que se nota claramente su composición al cortarlos.
Ahora, lo que si tienen que contener los dos, es ese hongo gris que se le forma en la tripa del salame cuando se los madura en sus sótanos, lejos ser un defecto, es una virtud que mejora el sabor del producto.
Sin medir fanatismos, y saber que en la variedad esta el gusto, vamos por los productos regionales, si pasas por alguno de estos pueblos tenes dos pasos obligados para hacer, sentarte en un bar a entrarle una picada con un vermú, y comprarte un par de salames para llevar a casa y o de regalo.
Espero hayan disfrutado esta nota con: Vermut con salamines y ¡Good Show!