La temporada de cosecha de manzanas en Río Negro marca el inicio del año para quienes hacen Sidra 1930 Saccani. Porque a partir de ahí comienza el período de elaboración, que finaliza con el envasado de sus cuatro variedades. Por eso, este año se decidió homenajear tanto a su ingrediente principal como a su origen, trayendo lo mejor de la gastronomía rionegrina a Buenos Aires y destacando la naturalidad y calidad de la fruta que da inicio a todo el proceso
Marca icónica del valle rionegrino, Sidra 1930 se elabora con manzanas Red Delicious seleccionadas, que son especiales por su cáscara, la que le aporta color y sabor. Es producto del primer prensado, lo que aporta mayor calidad, y se utiliza un 1,750 kg. de manzanas para elaborar cada litro de sidra. Además, atraviesa un exclusivo proceso de pasteurización que le permite ser un producto totalmente natural y sin conservantes. Además, tiene certificación de producto vegano y apto para celíacos.
“Para 1930, la cosecha es el inicio real del año calendario. Las manzanas se cosechan a fines de febrero en Río Negro, que gracias a su clima templado ofrece el entorno perfecto para el cultivo. Ahí es donde se hace el prensado, y el mosto viaja hasta nuestra planta de San Fernando, en la provincia de Buenos Aires, donde sigue el proceso de elaboración. Usamos unos 10 millones de kilos por año”, contó Marco Saccani, que además representa a la tercera generación de una familia con más de 60 años de tradición sidrera.
“Quisimos traer un poco de la esencia de Río Negro a Buenos Aires, de la mano de la sidra y de su gastronomía. Las manzanas y peras que se cultivan en el Valle son parte fundamental de la economía y la gastronomía regional”, contó Inés Mastrogiacomo, gerente de marketing de Sidra 1930, en un evento que contó con una mesa de quesos Ventimiglia y la presencia de los cocineros Juan Carranza y Juan Izaguirre, embajadores gastronómicos de la Patagonia, que prepararon un menú pensado para representar las cuatro regiones que componen la provincia: la cordillera, la estepa, el mar y el valle. “La sidra es un producto súper versátil, su consumo durante el año está creciendo y es ideal tanto para acompañar comidas como para usar en coctelería. Cada una de las variedades tiene sus particularidades y sus momentos para disfrutarla,” agregó. Mastrogiacomo.
Para esta ocasión, el bartender Ludovico De Biaggi presentó su “Apple Punch 1930”, un cóctel con 1930 Pera, aperitivo a base de alcachofas, vermú rosso y cordial de pomelo.
Sidra 1930 se elabora en cuatro variedades
1930 Demi Sec, la más elegante, es una sidra de excelencia desde su origen que logra un equilibrio perfecto entre aromas y sabores. Es ideal para acompañar comidas como quesos semi duros con frutas frescas y secas, sushi, y se realza con carnes blancas.
1930Dolce es una sidra dulce y fresca. Ofrece un dulzor propio de la manzana que la hace fácil de combinar con postres, como pueden ser mousses y postres cítricos.
1930 Pera nace de una selección de peras de la Patagonia Argentina. Su sabor distinto, color único y gran frescura la convierten en la estrella de todas las celebraciones.
Desde las más especiales hasta las de todos los días. Su acidez pronunciada va muy bien con quesos blandos salados, como el queso azul, gruyere entre otros.
1930 Rose fue el último lanzamiento de la marca. A la sidra fermentada se le agrega el jugo de frutos rojos, y esto resulta en un sabor dulzor moderado con notas intensas a ciruela, frutilla y cereza, con la ligereza de la sidra de base.
Las fotos de este artículo fueron tomadas con un Moto G54 de Motorola Argentina